En medicina veterinaria, la cirugía es un elemento esencial para el abordaje de patologías. Por ello, debemos asumir que todo procedimiento quirúrgico depende en gran medida de la anestesia, la cual muchas veces permanece oculta. El acto de la anestesia se conforma en diversas etapas y para dominarla en su totalidad nos dedicaremos en profundidad a cada una de ellas.
Las etapas iniciales deben planificarse para que el paciente llegue y se mantenga en la etapa quirúrgica el tiempo necesario y en las condiciones lo más óptimas posibles.
Nuestra meta es que en vuestra práctica clínica podáis asegurar que vuestras anestesias se desarrollan con ausencia de nocicepción, un plano hipnótico adecuado, la menor respuesta al estrés posible (cortisol liberado) y así como una ventilación y una función cardiovascular óptimas. Además, queremos mostrar cómo detectar complicaciones precozmente y cómo abordarlas adecuadamente.
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